Ahora ya no me molesta tanto que cuando voy con César de la mano y da un pequeño tirón para llamar la atención de algo ,sienta como si los músculos de los brazos se me resquebrajasen. Tampoco ya el hecho de que siga lloviendo, de que el frío no se acabe. Ahora lo que me molesta es la apatía que me produce todo. He visto con estupor el culo de Carla Bruni en todos los telediarios sin saber casi que pintaban el resto de los protagonistas. He probado el salmorejo al estilo de Consu. He estado una tarde con los caballos de Gema. He tenido sustos, gustos y disgustos, pero de momento, nada. Solo apatía. Estoy preocupada por los mios, por los ajenos y por mí pero todo bajo cierta calma que , sin embargo, me altera.
A lo mejor mañana con el sol todas estas sensaciones reviven y , con todos los sentidos del cuerpo, se apoderan de mí. A ver ...
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