martes, 2 de diciembre de 2008
LO QUE NO ME GUSTA (DE LA CALLE)
Por supuesto que no me gustan muchisimas cosas, pero como creo que todos podemos mejorar lo inmediatamente más cercano, empezando por nosotros, siguiendo por la familia, el barrio, la ciudad,... me basta el corto recorrido que hago cada día desde que llego a San Mamés , intento aparcar el coche y después los cincuenta, cien o doscientos metros que separen este del portal de mi casa para ver multitud de cosas que me disgustan. Por ejemplo:
- Que los niños y los mayores no puedan disfrutar de una tarde de otoño en el parque , porque ahora la moda es no limpiarlos de hojas durante semanas.
- Que la gente lleve a hacer sus necesidades a sus perritos a la zona de arena de los parques infantiles, dónde al día siguiente juegan los niños y se llenan de pulgas; o que los saquen por las aceras ,no recojan la porquería , luego te la lleves incrustada en las ruedas del carrito del niño y te la encuentres en la alfombra de la entrada de tu casa.
- Que los chavales vayan a toda velocidad con su bicicleta por las aceras, esquivando gente.
- Que el dueño del kiosko entrampe todos los días con su coche el cruce que tengo que pasar para llegar a mi casa.
- Que a veces me tenga que alegrar ver a la policia patrullar en mi barrio, porque después de dar cinco vueltas y encontrar coches en los pasos de peatones, en los cruces, subidos en las aceras, en segunda fila, etc , pienso que alguien tendría que poner orden, pero rápidamente compruebo de nuevo que lo único que han hecho es poner multas al que ha dejado su vehículo unos minutos en carga y descarga o en el bordillo amarillo; me ha dado tiempo al recorrer una y otra vez el barrio en busca de aparcamiento quien ha aparcado para cada tarea y quien desgraciadamente se encuentra la multa. También quien nunca tiene un papelito en el parabrisas tenga su flamante coche donde lo tenga.
- Que las madres incivilizadas se sienten en los bancos de los espacios públicos con la excusa de vigilar a sus hijos y se metan una tunda de pipas y cigarros que van escupiendo donde mejor cuadre. Los niños , por supuesto, están haciendo lo mismo en lo alto del tobogán con las bolsas de los gusanitos y persiguiendo a la pobre paloma coja que no acertó bien a elegir dónde posarse.
- Que cuando llegas deprisa a casa tengas que bajar al super y después de ir abrazando todas las cosas que necesitas ,franquees la linea de caja y te empuje la típica señora desagradable con un bote de tomate y te diga "paso yo, que solo llevo esto"...¿?. No dices nada, claro, porque tendrías que brazear y entonces caerías la barra de pan que llevas encima de los yogures que van sujetando los huevos de encima de la caja de galletas, en fin: se formaría un caos!
- Que los mismos tipos con las llamativas zapatillas de deporte que encuentras a menudo petaos al lado del cajero , se parezcan a unos que una mañana pasaban de soslayo comprobando que todos los coches del barrio dormían bien cerrados. Es extraño.
- Continuará... Seguro!
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